Fabricantes y enseñas están redoblando sus esfuerzos por competir por el consumidor a través del precio, una situación que no está ayudando a reforzar las relaciones entre las marcas, los distribuidores y los consumidores. De hecho, según registra el estudio, el 21% de los consumidores ha cambiado de establecimiento habitual en el último mes y el 49% afirma que ahorra comprando marcas blancas, frente al 25% que sigue adquiriendo los mismo productos que antes y el 4% que admite comprar menos cantidad o con menor frecuencia.
A esta infidelidad hacia los establecimientos y las marcas se suma la política de ofertas y promociones que los consumidores aprovechan también para aumentar su capacidad de ahorro. Casi cuatro de cada 10 españoles, un 39%, acudieron durante el último mes a las promociones del tipo “segunda unidad con descuento” y el 35% usó cupones de descuento, dos fórmulas de ahorro que permiten un mayor control y planificación de gasto. Por otra parte, un 34% optó por las ofertas 3×2 y un 31% adquirió productos con más cantidad por el mismo precio.
