El 52% de los consultados dice que se han percatado que hay más productos en oferta pero no todas interesan por igual a los consumidores, que siguen confiando en las marcas y en la innovación a la hora de realizar sus compras. Por eso, el 51% declara que presta más atención a las ofertas de las grandes marcas y a las de los nuevos productos.
En el caso de los denominados “futureshapers”, es decir, individuos que marcan las tendencias de futuro, a este 51% hay que sumarle 30 puntos más. Este segmento tiene un enfoque más dirigido al marquismo y a la innovación. Son también el grupo que más ampliamente declara que aunque en estos momentos se fija más en los precios se permite todavía más caprichos.
Según comenta Albert Ramírez, director general de TNS Consumer, “ante una excesiva presión promocional, existe el riesgo de que fabricantes y distribuidores abandonen políticas diferenciales de marca e innovación, desatendiendo así a su clientela de más valor que necesita cubrir otras necesidades más allá del precio. Es muy probable que si no encuentran lo que buscan en sus canales habituales de venta ni en sus marcas insignia, empiecen a buscarlo en canales más personalizados ya que son los que más tiendas visitan y los que realizan un mayor número de compras pequeñas.