El 66% de las compañías líderes del mercado afirma tener éxito gestionando el cambio (63% en el caso de las españolas).
La encuesta concluye que los directivos ven un nuevo perfil del consumidor del siglo XXI, más exigente, participativo e informado, y que esto supondrá, más que una amenaza, un acicate para diferenciarse de la competencia. Así, el 76% de los encuestados considera que la existencia de este nuevo tipo de consumidor tendrá un impacto positivo en sus empresas. Para adaptarse e incluso anticiparse a las demandas de este tipo de consumidor, la alta dirección prevé incrementar sus inversiones un 22% durante los próximos tres años.
Las empresas españolas coinciden en esta tendencia: el 83% prevé que esta tendencia tendrá un impacto positivo en sus negocios, y por tanto, espera aumentar un 25% sus inversiones.
Por otra parte, el 60% de las organizaciones encuestadas está emprendiendo una estrategia global y la mayoría de las líneas de actuación que están acometiendo se dirige a proporcionarles las capacidades necesarias para competir como compañías globales.
También crecerá la importancia de la Responsabilidad Social Corporativa, de modo que los directivos encuestados prevén incrementar sus inversiones un 25% para adaptarse a esta tendencia.
