Si considerabais que en cuanto a la tecnología estaba casi todo inventado todavía nos queda mucho por ver, esta revolución paulatina solo acaba de empezar. Durante este año están adquiriendo cada día mayor protagonismo los accesorios wearables, que no dejan de aumentar su volumen de ventas en todo el mundo, pero ¿qué son realmente?
Si lo traducimos al castellano podríamos hablar de elementos tecnológicos “ponibles”, complementos que van más allá de cumplir con un fin estético donde la funcionalidad se convierte en la principal característica. Para obtener el máximo rendimiento de ellos es necesario conectarlo, además de al usuario del producto, a un dispositivo complementario como por ejemplo un ordenador. Smartwatches, zapatillas con microchip, bandas deportivas con microprocesadores, anillos bluetooth o gafas inteligentes son solo una pequeña muestra de cómo la tecnología invade nuestros complementos diarios.
Los smartwatches son, sin duda, el producto estrella de los dispositivos inteligentes por el momento, ya que se prevé que a finales de 2014 Google lance de manera comercial sus famosísimas Google Glass, o conocidas también como gafas inteligentes, que sin duda supondrán un antes y un después en muchos aspectos. Las Google Glass se componen de una montura que incorpora un panel táctil a la altura de la sien derecha y de una pequeña pantalla sobre la línea de visión al más puro estilo futurista. Con ellas puedes realizar desde las funciones más básicas como consultar tu agenda o ver y compartir fotografías, hasta realizar pagos con dispositivos compatibles, experimentar con la realidad aumentada o traducir textos instantáneamente.
En la actualidad los estudios realizados sobre el comportamiento visual, más conocidos como eye tracking, adquieren cada vez mayor consistencia gracias a la creación de estos productos que proporcionan información fundamental para aumentar la usabilidad de los mismos. El eye tracking ofrece al marketing información tan valiosa como el recorrido visual, lo que permite la creación de acciones optimizadas y la utilización de la usabilidad inducida para facilitar la experiencia de la navegación a través de Internet.
Como resultado de ello, la aplicación de estos conocimientos del marketing a las Google Glass permitirá ofrecer a los consumidores información de productos que sabemos de antemano que le interesan. La conectividad de este gagdet y la realidad aumentada que proporcionan, facilitan a las empresas la oportunidad de usar acciones de inbound marketing, lo que significa que los usuarios interactúan con las marcas de forma consentida y de manera deseada.
En un futuro quizá sea posible estar en el supermercado realizando la compra y que el dispositivo de Google nos muestre la localización del producto que buscamos dentro del comercio, nos describan con detalle las características del mismo, como aplicarlo o su composición.
Debido a que es un producto que no ofrece una previsión de implementación rápida y masiva, pero sobre todo debido a la novedad de lanzamiento, más aún en España donde todavía no se comercializan, es un ámbito que se encuentra en una fase de progreso constante. Hay un reducido número de empresas nacionales, como por ejemplo C2 Intelligent Solutions, que ya están trabajando en el desarrollo de aplicaciones para las gafas inteligentes de Google y así poder aplicar a los negocios el marketing más vanguardista.
Los cambios en el comportamiento de los consumidores están influidos por el entorno tecnológico que los rodea, en el cual se integran y participan adaptándose plenamente a él. Estos cambios latentes modifican la rutina y los hábitos diarios por lo que dar respuesta a ellos puede garantizar la supervivencia de una empresa a largo plazo. En ellos tiene una gran importancia el marketing, que con su línea vanguardista siempre nos lanza la pregunta: ¿Renovarse o morir?
Eduardo Canelles Romero
Socio Fundador y director comercial de C2 Intelligent Solutions