“La legislación que actualmente rige la propiedad intelectual y la privacidad en el uso de las redes sociales es obsoleta y local, lo que hace se tenga que utilizar normas antiguas para supuestos distintos a los que existían en el momento que fueron concebidas”, aseguró Alejandro Touriño, responsable de Information Technology de Ecija Abogados, con motivo del II Curso de Periodismo Digital y Redes Sociales, que se ha celebrado en la Universidad Europea de Madrid y que ha contado con la colaboración de Tuenti, el periódico digital lainformacion.com, la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y Écija Abogados.
Actualmente, según Touriño, el uso de las redes sociales en España se rige, entre otras, por la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información, del año 2002, y por la Ley de Propiedad Intelectual, del año 1996. “Por estos motivos, muchos aspectos que tienen cabida dentro de una red social tienen que regularse con normas que no están preparadas para el entorno de internet propiamente”.
En el caso de la propiedad intelectual, hay ejemplos muy claros de este ‘desfase’ en su aplicación a las redes sociales, sostuvo el experto. “Se trata de una norma bastante rígida que, por ejemplo, no te permite utilizar contenidos de un tercero aún citando la fuente salvo que sea con fines docentes o de investigación. Es decir, en principio, según la ley española, no se podría coger un texto de un blog y colgarlo en el tuyo aún poniendo la fuente. Aunque esté socialmente aceptado, la ley no lo permite”, apuntó.
El otro gran problema de la legislación actual en redes sociales es el localismo de las leyes. La mayoría de las cuestiones son reguladas desde el punto de vista de cada Estado, cuando las redes sociales dirigen sus servicios internacionalmente. Por ello, el sector pide que se trabaje para conseguir una armonización o alguna solución global. En este sentido, en Europa ya existen movimientos para instaurar unos parámetros de privacidad común a todo los operadores de redes sociales, sin distinción en función del país donde estén ubicados.