Ikea, Danone, Nivea y Dove han sido las marcas más citadas por los entrevistados en Alemania, Reino Unido, Francia, Estados Unidos, Brasil, China, India y Australia a la hora de referirse a productos sostenibles, una cualidad que cada día preocupa más a los ciudadanos según muestra la tendencia creciente hacia la compra de productos más ecológicos.
Más del 60% de los consumidores de todo el mundo prefiere comprar marcas de compañías responsables con el medio ambiente y que respetan el entorno. En Europa son los alemanes los que más se suman a esta predisposición y el 30% afirma haber comprado más productos ecológicos durante este año. El 40% de los británicos, por el contrario, no están dispuestos a pagar más por un producto solo porque sea verde.
El packaging y el material utilizado para el envoltorio del producto son concienzudamente estudiados por los consumidores y son los atributos que más influyen a los europeos en la decisión de compra. En los países en vías de desarrollo les influyen de manera más notoria los anuncios en televisión.
En todos los países encuestados existe la sensación de que los gobiernos deberían jugar un papel más determinante en la regulación de medidas ecológicas de las empresas de su país. Los alemanes son los únicos satisfechos con las medidas adoptadas por las autoridades respecto a las actividades medioambientales de las empresas.
