La de cal: Parecía un sueño. Cada vez había más perros Scotty por la calle (además con ese nombre). No había ninguna necesidad de hablar del producto (¡Mira que es difícil hablar de un rollo de papel higiénico!) Cada vez que el perrito salía, el cerebro del consumidor sumaba gross rating points y todo el mundo era feliz.
Habíamos creado un icono que recordaba un producto difícil de contar, mejorado la imagen de producto, sostenido su premium de precio, al consumidor le gustaba verlo y lo usábamos en promociones (en el punto de venta en forma de perro de peluche