“Ser pequeños es nuestro superpoder”. Con esta afirmación, Sergi Martínez resume la filosofía que ha guiado a Cervezas Ambar a lo largo de sus 125 años de trayectoria. Una compañía que, sin perder su esencia de empresa familiar, ha sabido adelantarse a las transformaciones del mercado con propuestas que combinan maestría cervecera, empatía con el consumidor e innovación constante. Desde la creación de la primera cerveza sin alcohol en España hasta el desarrollo de técnicas exclusivas como el uso de lúpulo recién molido, Ambar sigue brindando por el futuro con “sed de más”.
Cervezas Ambar cumple 125 años y lo hace sin perder el pulso ni la curiosidad. Integrada en el Grupo Ágora – corporación de empresa totalmente independiente y 100% familiar que también agrupa a Moritz y otras referencias del sector Bebidas- la cervecera zaragozana sigue apostando por la innovación, la sostenibilidad y una manera propia de hacer las cosas, alejada de los moldes de las grandes multinacionales.
- Cervezas Ambar cumple 125 años manteniendo su carácter de “pequeños entre los grandes”. ¿Qué ventajas competitivas ofrece este posicionamiento en un mercado dominado por grandes grupos cerveceros?
Ser pequeños es nuestro superpoder. Es una decisión estratégica que nos impulsa a ser ágiles, creativos y nos da libertad para arriesgar y conectar de forma auténtica en un mercado híper competitivo. Esa mentalidad de start-up de 125 años es lo que mantiene viva la curiosidad en cada cerveza que elaboramos.
- ¿Cómo han conseguido mantener la esencia de una empresa familiar a lo largo de más de un siglo sin renunciar al crecimiento y la modernización?
Combinamos el alma de una empresa familiar con más de 160 años con la inquietud del pequeño cervecero que comentaba anteriormente. Nuestra herencia nos da raíces profundas pero nuestra mirada está en crear el futuro; es nuestro ADN. Fuimos pioneros en categorías como sin alcohol y sin gluten. Más recientemente innovamos para elaborar la única cerveza lager con Lúpulo Recién Molido, una técnica propia que mantiene el sabor y aroma único de Ambar Especial; o Ambar Triple Zero, la única 00 alcohol y 0 azúcar. Este carácter nos permite mantener nuestra esencia de empresa familiar inquieta y, a su vez, es nuestra vía para crecer en un mercado dominado por gigantes.
- ¿Cómo definiría, en una frase, el posicionamiento de Grupo Ágora y con una palabra el de cada una de sus referencias?
Grupo Ágora se define por nuestro propósito: que todo el mundo pueda disfrutar de los pequeños placeres de la vida. Hoy en día el mundo se enfrenta a grandes retos, pero creemos que es importante no olvidarnos de esos pequeños momentos que dan sentido a nuestro día a día. Por ejemplo, algo tan sencillo como compartir una cerveza.
Ambar es excelencia; Moritz, un icono creativo con ADN barcelonés
En cuanto a nuestras marcas, Ambar es excelencia, y trabajamos con la convicción de que elaboramos las mejores cervezas del mundo, respaldada por reconocimientos que nos motivan a ir más lejos. Por ejemplo, recientemente Ambar Especial fue escogida como mejor cerveza lager del mundo con la máxima puntuación posible por un jurado de 29 países; y Ambar Export como mejor cerveza tostada en este mismo certamen con una puntuación perfecta de 100 sobre 100 puntos. Moritz es un icono barcelonés con más de 160 años que condensa tradición, modernidad y creatividad. Además, completamos nuestro portfolio con marcas de agua, refrescos y distribuidoras propias para hostelería.
Vivencias reales
- Desde lanzar la primera cerveza sin alcohol de España hasta crear la primera sin alcohol y sin gluten del mundo, Ambar ha sido pionera en varias ocasiones. ¿Qué criterios siguen para innovar en nuevas categorías?
Obviamente evaluamos tendencias de mercado, y no es casualidad el enfoque que hemos tenido en el segmento salud. Pero más allá de informes que todos manejamos, nuestra innovación no sólo busca nuevas tendencias, sabores o formas de elaboración sino también resolver vivencias reales, combinando maestría en la elaboración y empatía con las personas. A veces, todo empieza cuando alguien te dice “ya no puedo disfrutar de una cerveza” y nos motiva a buscar una solución.
No innovamos solo por tendencia, lo hacemos para responder a vivencias reales de las personas
En 1976 rompimos moldes con la primera sin alcohol – que hoy evolucionamos a Triple Zero ya que nuestra gama de cervezas 00 es también 0 azúcar. Simplemente, imagina la emoción de una persona intolerante al gluten al volver a brindar con una cerveza. No sé si es si eso es un criterio, pero es lo que nos inspira y motiva.
- La colección Ambiciosas se ha convertido en un laboratorio creativo para la marca. ¿Qué papel juega esta iniciativa dentro de la estrategia global de producto? ¿Y las variedades Triple Zero?
Ambiciosas es experimentación pura que, a su vez, eleva la excelencia de nuestras cervezas principales. Por ejemplo, hace años experimentamos con la molienda de la flor de lúpulo en la Ambiciosa Terrae, una maravilla de cerveza elaborada con lúpulo cultivado en una antigua viña de Olite. En ese momento empezamos a ver las propiedades diferenciales que ofrecía esta técnica, manteniendo el máximo sabor durante más tiempo y la aplicamos en la elaboración habitual de Ambar Especial, haciendo que tenga un diferencial único respecto al resto de cervezas. La gama de Ambar Triple Zero, por su parte, es nuestra propuesta inconformista para consumidores que buscan el máximo cuidado sin renunciar al sabor, y que nos está permitiendo diferenciarnos y crecer en el segmento saludable al ser la única cerveza 0 alcohol y 0 azúcar.
- El público joven busca autenticidad, experiencias y marcas con propósito. ¿Cómo se adaptan a los nuevos códigos culturales de esta generación?
Parte de la ventaja de ser una empresa familiar y de esa actitud decididamente pequeña, es no perder de vista la cercanía, la autenticidad y un carácter singular que no podríamos tener si fuésemos una enorme multinacional.
En un mundo cada vez más globalizado es más necesario que existan propuestas diferentes y cercanas. Queremos poner por delante a las personas antes que el éxito en el mercado. Así lo hemos hecho con propuestas como las sin gluten o las Triple Zero, que responden a valores de inclusión de forma que todo el mundo pueda disfrutar de las mejores cervezas.
- La generación Zeta es la reina del scroll… ¿qué acciones están desarrollando para captar la atención de este público sin perder el tono y valores de marca?
Con respeto a la velocidad vertiginosa con lo que todo está cambiando, hay algo que nunca falla: contenido de interés, genuino y sorprendente. Lo difícil es crear ese contenido cuando vivimos en la economía de la atención. A veces lo intuimos, otras escuchamos a nuestra comunidad, pero lo mejor es cuando directamente les involucramos. Para nuestro 125 aniversario, preguntamos a nuestros seguidores cómo querían que lo celebrásemos y el resultado fue mágico: propuestas para registrar el color Ambar, viajes, poner nombre a una calle, un pastel muy especial que nos dedicó Roro (que repetimos tras un pequeño incidente), subir al Monte Fuji, crear un helado de Ambar Radler que fue un éxito… todo ello, y mucho más, hecho realidad. El aniversario aún no ha acabado, y puedo decir que pronto vendrán nuevas sorpresas.
Los jóvenes, se dice, no beben cerveza. ¿Detectan un cambio de hábito estructural o es una respuesta coyuntural del mercado?
Hay que matizar esta afirmación, no es que no beban cerveza, sino que lo hacen de otra forma y en otras ocasiones. Los jóvenes están cambiando patrones de consumo: menos noche, menos alcohol, sin alcohol, nuevos sabores, rituales… sin duda son claves que nos ayudarán a seguir innovando. La cerveza tiene más de 7000 años de pasado, ha convivido con muchas civilizaciones y generaciones. Con esa capacidad de adaptación seguro seguiremos estando en el día a día de los Zeta.
Una categoría marquista
¿Cómo afecta a Ambar la expansión de la marca del distribuidor dentro de la categoría cervecera?
La cerveza se ha caracterizado por ser una categoría marquista en la que la MDD ha tenido una presencia inferior que en otras categorías. Entre otros motivos, la estrecha conexión del consumidor y la alta calidad nos hace resilientes. Para nosotros el único camino es seguir trabajando enfocados en calidad e innovación. No queremos competir en ser la cerveza sin alcohol más económica, sino que nuestra forma de destacar es siendo la única cerveza 00 alcohol, 0 azúcar y que, simplemente, está buenísima.
A lo largo de su trayectoria, Ambar ha construido un relato que conecta con territorio, tradición y creatividad. ¿Cómo abordan hoy el storytelling de marca en sus campañas?
Nuestro heritage no es sólo una fecha y nuestros orígenes no son sólo puntos en el mapa; son aspectos muy importantes para nuestras marcas y parte inherente de nuestro storytelling. A partir de ahí, creatividad siempre y en todo.
Buscamos relevancia más que presión publicitaria; ahí está nuestro terreno de juego
¿Cómo equilibran el mensaje institucional con una comunicación más cercana, emocional y efectiva para nuevos consumidores?
Una marca como Ambar tiene presencia en muchas situaciones. Hay momentos para lo solemne y otros para lo cotidiano. Y algunos en los que todo se une. Por ejemplo, es bonito ver – y más sorprendente para una persona no nacida en Aragón – el efecto de Pilares o el día de Aragón. Es comunicación que sale de dentro, honesta, cercana, que toca la fibra tanto al que la elabora como, mucho más importante, al que la recibe.
Alianzas que trasciendan
- ¿Qué papel juegan los patrocinios culturales como PhotoEspaña o el Festival Vive Latino en su estrategia de marca? ¿Qué buscan más allá de la visibilidad?
Buscamos alianzas que trasciendan la mera exposición. Queremos socios que compartan nuestra visión de crear experiencias memorables y que crean que la activación conjunta puede ayudar a potenciar no sólo nuestras marcas sino también el evento en sí. Los dos que mencionas son un ejemplo de ello. Desde los concursos de fotografía que hemos realizado junto a PhotoEspaña y que nuestra fábrica centenaria sea parte de su sede de exposiciones, a las activaciones singulares que cada año hacemos en Vive Latino y son un éxito rotundo.
- ¿Cuál es el peso de la comunicación digital, el contenido social y los creadores frente a medios tradicionales en su mix de medios?
Cada vez más. No simplemente por el hecho de que el peso de la comunicación digital está creciendo, sino porqué es donde creemos que podemos competir mejor dentro del ruido y las inversiones enormes que hay en nuestro sector. Nuestra cuota de impacto online ha ido creciendo año a año de forma sólida y hoy miramos cara a cara a marcas que lo están haciendo muy bien.
- Ambar ha sido reconocida por su iniciativa ecológica y sostenible en los Premios Agroalimentarios de Aragón. ¿Cómo se integra la sostenibilidad en su modelo de negocio?
Vivimos en una sociedad que cambia a gran velocidad. Y creemos que la forma más honesta de ser sostenibles es hacer las cosas bien, pensando que además es un buen negocio. Negocio entendido no sólo como rentabilidad, sino también como responsabilidad y valor de marca. Ahorramos energía, reducimos emisiones, lanzamos productos responsables. Este premio lo recibimos con enorme orgullo, porque reconocía lo que estamos haciendo hoy y lo que hemos construido durante 125 años de historia.
- ¿Qué proyectos destacaría dentro de su compromiso medioambiental?
En Ámbar hemos apostado por la eficiencia y el ahorro energético con placas solares y biogás. Por el agua, con una depuradora única. Por el planeta, reduciendo plásticos, aligerando el peso de nuestras botellas y trabajando en ecodiseño o la circularidad, hasta llegar al objetivo de cero residuos.
Hemos creado productos inclusivos como las Triple Zero sin azúcar o la cerveza sin gluten. Hemos innovado con lúpulo recién molido para dar más frescura, y nos hemos atrevido con la colección Ambiciosas, que lleva a la botella ingredientes de proximidad: la trufa, las naranjas de la Aljafería, el trigo de los Monegros. Y seguimos reforestando con nuestros Bosques Ámbar con más de 7500 árboles plantados.
Pero esto no se queda en el pasado. Ya estamos trabajando en proyectos con agricultores locales y apicultores de Aragón, en ensayos de logística con hidrógeno, en un bosque urbano en Zaragoza y en una nueva generación de cervezas, pensadas para todos, respetuosas con el cuerpo y con el planeta.
- ¿Cómo imaginan a Ambar (y a Grupo Ágora) dentro de 25 años, cuando se cumpla el próximo gran aniversario?
Dentro de 25 años queremos ser una marca con más historia, pero con la misma alma joven, inquieta, cercana y que siga ofreciendo momentos de felicidad a más personas. Si seguimos logrando que alguien brinde con una de nuestras cervezas sabremos que cumplimos nuestro propósito: disfrutar de los pequeños placeres de la vida.


