Según el documento, todos los consumidores pueden encontrarse en algún momento en situaciones de vulnerabilidad, por lo que los diputados reclaman la creación un marco legislativo más estricto para evitar abusos en los sectores con mayor riesgo, como la industria financiera, el transporte o la alimentación. En este sentido, el informe insta a los estados miembros a introducir en sus legislaciones medidas específicas para garantizar una protección adecuada que vaya más allá de mera información.
También destaca la importancia de una correcta regulación de los mercados financieros, «cuya complejidad implica que, en potencia, cualquier consumidor puede llegar a ser vulnerable». Una encuesta de la Comisión Europea destaca que el 70% de las páginas web de empresas de este sector presentaba irregularidades fundamentales en la publicidad y la información básica exigida, y presentaban el coste de los productos de manera engañosa.
El Parlamento Europeo también reclama más acciones en el sector de la alimentación, con el fin de reducir los niveles de obesidad infantil y otras enfermedades relacionadas con la dieta, entre otros sectores. El texto aprobado destaca que los menores son más vulnerables a publicidad agresiva de productos con elevados contenidos de azúcares, grasas o sal.
Asimismo, los diputados piden también que se mejore la transparencia en el caso de los transportes, nuevas tecnologías y telefonía.
