En este número hemos elaborado un informe especial sobre Retail. Algo atrevido para IPMARK, teniendo en cuenta que el grupo editorial publica desde hace 45 años una publicación, DARetail, dedicada a este sector. Pero necesario si tenemos en cuenta la relevancia que desde el punto de vista del marketing y la publicidad tiene este sector.
El comercio es una de las industrias más sólidas de la economía española. Su aportación al PIB es de más del 13% y es el sector que más empleo genera, con más de 3,2 millones de trabajadores.
Este sector de actividad esencial ha sido golpeado por la crisis sanitaria de manera distinta. Por un lado, la distribución alimentaria se ha visto envuelta en una sobre demanda causada por el pánico inicial a la pandemia, el cierre de los restaurantes, y la necesidad de realizar todo el consumo en los hogares durante estos últimos dos meses de confinamiento. La respuesta de estas compañías ha sido titánica, por un lado, para mantener la cadena de suministro abastecida, y por otro para garantizar la seguridad de sus empleados y clientes en sus establecimientos.
El resto de los sectores del Retail, se han visto obligados a cerrar irremediablemente durante el confinamiento, sin poder rentabilizar sus establecimientos físicos, y basando las ventas únicamente en el comercio electrónico, que no ha suplido la facturación perdida por los canales tradicionales.
Irremediablemente los retailers van a ver durante los próximos meses un cambio de paradigma en el comportamiento del consumidor, más temeroso, desconfiado, con unas prioridades centradas en su propia seguridad, con menos tiempo y menos ganas de emplearlo en actividades que puedan suponer un riesgo para él o los suyos… y con menor poder adquisitivo.
Esta nueva realidad del consumidor seguramente provoque una reducción de oferta tanto en establecimientos como en marcas para elegir .No sobrevivirán las más fuertes, las más preparadas, ni siquiera las más solidarias, si no las que el consumidor decida, con su dedo en una pantalla en gran medida. La lucha por ganar el favor del consumidor está servida, y la carrera por aportar un mayor valor en su vida cotidiana estará llena de tecnología, conocimiento de sus nuevos hábitos y anticipación a sus necesidades. Nada nuevo, para los departamentos de marketing. Mucho trabajo también.
