De acuerdo con el último informe de la organización Ecomerce Europe, los ingresos por la venta online de bienes y servicios creció un 19% en el continente, hasta alcanzar los 311.600 millones de euros. Además estima que Internet ya contribuye un 3,5% al PIB europeo y que ese porcentaje se duplicará en 2016 y se triplicará en 2020. Así mismo, el número de empleos creados de forma directa e indirecta por el sector del comercio electrónico roza los dos millones.
Por otro lado, el II Estudio de Comercio Electrónico en Europa de Trusted Shops y el Instituto Infas, el sector se encuentra en uno de sus mejores momentos y, de hecho, camina ajeno al ritmo de la economía general.
En el caso de España, se trata de uno de los mercados e-commerce más jóvenes de Europa, pero los compradores ya están maduros y la previsión de crecimiento está entre un 18% y un 20% en los próximos años. Estas cifras, según los responsables del estudio, suponen una apuesta segura en venta online de bienes de consumo y “confirman el potencial el comercio electrónico como un auténtico dinamizador para la situación económica española”.