Accenture ha presentado en Davos un nuevo informe sobre los cambios experimentados en los consumidores y uno de sus primeras conclusiones es que aunque el 73% de los directivos de las grandes empresas saben que se ha operado un gran cambio, el 74% de los mismos no acaba de entender dicha transformación. Además, el 80% opina que no están aprovechando todas las oportunidades que ofrece el momento.
En un entorno tan enmarañado, solo las empresas que sepan sacar partido a estas modificaciones en el comportamiento del consumidor lograran crecer en los próximos años. Según las estimaciones de Accenture, los sectores que sigan de cerca estas fluctuaciones se repartirán beneficios por valor de 1.800 millones de euros de aquí a 2016.
Los cambios más notorios experimentados por los consumidores tienen que ver con su creciente conexión a Internet, su exigencia de productos mejores y más personalizados y su preocupación por el impacto social y medioambiental de empresas y marcas. Las cifras hablan por sí solas: el 73% de los consumidores utilizan la Red para buscar y comprar; el 68% desea poder adquirir lo que quiere en el momento que quiera; el 63% aprecia el hecho de poder personalizar sus compras, y el 51% asegura valorar la sostenibilidad de un producto antes de comprarlo.
Inversión, estrategia y flexibilidad
En su informe, Accenture recomienda a las empresas invertir en capacidades analíticas avanzadas y en la formación de sus empleados a fin de analizar los cambios del consumidor e interpretarlos correctamente.
Así mismo se vuelven imprescindibles los perfiles y mentalidades estratégicas para detectar movimientos negativos entre los consumidores y posibles detectar posibles amenazas competitivas. Como ejemplo, Accenture hace referencia a una compañía de alquiler de coches que imitó el modelo de negocio de empresas más pequeñas y comenzó a ofrecer alquileres por horas. Esa operación les permitió aprovechar su tamaño y su presencia global para reducir la amenaza de los nuevos competidores, además de mejorar el servicio ofrecido.
Los modelos de organización flexible se impondrán para ganar agilidad. Y conseguirlo puede llegar a través de adquisiciones, desinversiones o asociaciones que complementen a la empresa. Se trata de combinar las ventajas que ofrece el tamaño de una gran compañía con el enfoque personalizado de una de pequeño tamaño, así como de las ventajas de lo tradicional y la vanguardia de lo nuevo.
Las empresas de los mercados emergentes parecen estar mejor preparadas que las de los mercados desarrollados para aprovechar las oportunidades que plantean los cambios en el comportamiento de los consumidores. Entre sus directivos existe una mayor compresión de los cambios de los consumidores (32% frente al 17%) y están más dispuestos a invertir en actividades dirigidas a los consumidores.
El informe completo puede consultarse en https://ipmark.com/pdf/Global_Growth.pdf