Renault Group ha anunciado este martes el nombramiento de Duncan Minto como director general interino, en sustitución de Luca De Meo, quien deja la compañía tras cinco años al frente del fabricante francés para incorporarse al grupo de lujo Kering.
El movimiento confirma un escenario que ya se contemplaba en el sector: la dirección interina de la compañía mientras se cierra la búsqueda del nuevo primer ejecutivo. Un proceso que, según Renault, «ya está muy avanzado» y sigue bajo la supervisión del Comité de Gobernanza y Retribuciones del Consejo de Administración.
Durante este período de transición, Minto gestionará el día a día de la compañía junto a Jean-Dominique Senard, quien asumirá las funciones de presidente de Renault S.A.S., la sociedad operativa del grupo.
El anuncio se produce en un contexto de resultados desiguales para Renault. En el primer semestre del año, el grupo ha facturado 27.600 millones de euros, un 2,5% más que en el mismo periodo de 2024. Sin embargo, las ventas de junio, por debajo de las previsiones, han llevado a la compañía a ajustar sus objetivos anuales.
Renault ha cerrado el semestre con un margen operativo del 6% sobre la cifra de negocio y un flujo de caja de 47 millones de euros, afectado por una variación negativa del capital circulante, próxima a los -900 millones de euros. La compañía ha señalado además la presión comercial derivada de la caída del mercado minorista y el menor rendimiento en su actividad de vehículos comerciales ligeros.
Ante esta situación, Renault ha revisado a la baja su previsión de margen operativo anual al 6,5%, frente al 7% estimado previamente, y ha situado su objetivo de free cash-flow entre 1.000 y 1.500 millones de euros, cuando antes esperaba alcanzar los 2.000 millones.
El grupo mantiene su apuesta por una política comercial estricta y un plan de contención de gastos a corto plazo, enfocado en la reducción de costes generales, administrativos, de producción e I+D.
