La marca de snacks del grupo PepsiCo, Doritos, ha decidido rescindir el acuerdo de colaboración con la activista Samantha Hudson, tan sólo dos días después de haber firmado el contrato (4 de marzo). Esta decisión de la firma de alimentación llega tras hacerse públicos tweets polémicos de Hudson publicados en 2015 en Twitter (ahora X).
La activista ya había protagonizado una campaña de 50 segundos que estuvo presente en las redes sociales de Doritos, que ya han sido eliminados de los distintos perfiles sociales de la marca de snacks. Según Rolling Stone, Doritos no tiene intención de mantener ningún tipo de relación con Hudson.
Los usuarios de la red social sacaron a la luz diferentes tweets de la activista tras conocerse la colaboración, cuyo contenido era ofensivo e inapropiado. Hudson, en un comunicado, señala que: “Me gustaría aclarar que estos tweets ya salieron a la luz hace unos años y ya pedí perdón y manifesté mi opinión al respecto. Me reitero pues, a pesar de haberlos escrito cuando era menor, en un contexto dónde la tónica general de las RRSS era hacer humor negro más bruto y con la pretensión de llamar la atención usando temas muy desafortunados, creo que son comentarios totalmente fuera de lugar, desagradables y ofensivos”.
Hudson también aclara en ese comunicado que uno de los tweets es totalmente falso (“acabo de pasarle la lengua a mi prima pequeña por su vagina”), pues la fecha es de 2014 y yo me creé la cuenta en 2015. Digo esto porque, aunque el resto de publicaciones son reales y su contenido es desdeñable, creo que se está utilizando este post manipulando para generar un relato perverso que me acusa de pederastia”.
Más colaboraciones fallidas
No es la primera relación entre una marca y un personaje público que sale ‘rana’. En IPMARK, publicamos recientemente un reportaje donde se recoge diferentes ejemplos de compañías que terminaron su relación con un actor o personaje conocido, como fue caso de la actriz vasca Itziar Ituño que, tras haber participado en una manifestación a favor de la libertad de los presos etarras, BMW e Iberia decidieron finalizar el contrato de colaboración con la actriz.