Los consumidores españoles comienzan a normalizar sus hábitos de consumo y una de las primeras medidas está siendo la sustitución de las marcas blancas por los productos de primeras marcas en promoción.
El sector del gran consumo creció un 2% en España, un porcentaje superior al registrado en otros países europeos como Alemania, Francia y Reino Unido. El año pasado comenzaron los signos de recuperación con un incremento en el volumen de ventas pero sin aumento de precio.
Según los datos recogidos por IPSOS sobre los cambios de hábitos de consumo durante la crisis, el 83% de la población española tomó alguna medida de ahorro especial en esta época. Muchos consumidores españoles (64%) optaron por la compra de productos de marcas blancas (el 64% de la población española).
De cara al 2016, la mayoría de las personas encuestadas que han seguido algún patrón de ahorro quieren recuperar ciertos hábitos de consumo. En concreto, el 53% de los españoles que eligieron sustituir primeras marcas por marcas blancas, quieren dejar de hacerlo. Aunque todavía reside cierto temor a volver a las costumbres previas a la crisis, se espera que el 64% de la población española modificará sus hábitos de consumo el año que viene.
Promociones contra la crisis
Durante los periodos más duros de la crisis, las marcas de gran consumo se vieron obligadas a invertir en campañas promocionales online y offline, aumentando de esta manera el volumen de sus ventas pero reduciendo el margen de beneficio. El 70% de españoles han adquirido productos en oferta o se han beneficiado de estas promociones, inclinando la balanza a favor de los productos de las primeras marcas en promoción.
Miguel Fernandes de Oliveira, executive partner en España de la multinacional PacSis Linking Consumer & Brands, empresa dedicada a la implementación de acciones de impacto en ventas para marcas de bienes de gran consumo (FMCG) resalta que “el 70% del ranking de las principales marcas que se consumen en España son marcas nacionales. Esto se debe a la fuerte inversión destinada a actividades de promoción, ofertas y vales de descuento que han realizado”. También indica que “este tipo de acciones deben ser una prioridad para las marcas, ya que son las herramientas más eficaces para condicionar la decisión de los consumidores a la hora de elegir una marca u otra”.
