La industria de Alimentación y Bebidas cierra en 2020 un ciclo de seis años de crecimiento continuado en producción, creación de empleo y el peso del valor creado. El sector ha sumado un total de 123.854 millones de euros, un 5,3% menos que en 2019, reflejando los efectos de la crisis sanitaria, especialmente debido a la paralización del turismo y restricciones en hostelería.
Aún así, este sector finalizó el año pasado con un descenso menos acusado que el conjunto de la economía español (-11%), siendo el sector industrial que mejor ha soportado la pandemia, tal y como se recoge del ‘Informe Económico Anual 2020’ de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (Fiab), presentado el 11 de mayo en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
El valor añadido bruto (VAB) -magnitud macroeconómica que mide el valor total creado por un sector- experimentó un descenso del 8,37% hasta los 24.594 euros. La participación de esta industria sobre el total de la economía se ha mantenido en un 2,4% y en un 14,75% en el conjunto de la industria.
Hostelería y turismo, actividades con peores pérdidas
Este sector señala que los efectos de las restricciones sanitarias en hostelería y la paralización del turismo nacional e internacional han repercutido en los resultados del año pasado. Estos escenarios han registrado las peores pérdidas, especialmente en aquellos productos vinculados a esta actividad, y que no ha podido ser amortiguado ante el aumento de consumo en el hogar o repunte de las exportaciones.
En el hogar, el consumo se incrementó un 16,15%, entre los meses de enero y noviembre de 2020, alcanzando los 71.319,9 millones de euros, últimos datos oficiales disponibles y presentado en el informe de Fiab. En este escenario, el gasto per cápita también ha crecido, hasta los 1.610 euros de media, un 19% más respecto a los datos de 2019. De hecho, la presencia de productos de alimentación y bebidas en la cesta de productos del IPC (índice de precios al consumidor) creció hasta representar el 20,34%, reflejando un cambio en los hábitos de consumo generados por la crisis sanitaria.
Esta industria sumó 431.800 empleos directos
Acerca del tejido empresarial y empleo, este sector contabilizó un total de 30.573 industrias, con un cierre de persianas de 200 empresas con respecto 2019. Las bajas se manifiestan principalmente en el tramo de pequeñas empresas, aunque el peso de la pyme sigue en el 96% de toda la industria.
Se destaca en el informe, que el sector ha mantenido el proceso de concentración empresarial mostrado en años anteriores. En concreto, las grandes compañías (más de 200 empleados) se incrementaron en 21 nuevas industrias de las cuales cinco corresponden a más de 1.000 trabajadores.
En empleo, el año pasado, esta industria sumó 431.800 empleados directos, con un leve descenso del 1,1% en la cifra de la Seguridad Social. Cifras positivas en comparación con el resto de industrias, como la manufacturera (-2,2%) y del total de la economía (-2,2%).
El deterioro de empleo llegó a partir de marzo del ejercicio anterior, puesto que los números acumulados hasta febrero de 2020 mantenían la tónica favorable, mientras que el siguiente mes registró una caída del 1,7%. La aplicación de los ERTE ayudó a amortiguar el golpe a esta industria, que, a pesar de ser sector esencial, redujo su plantilla del 82,8% entre los meses de mayo y diciembre. En empleo femenino, ese segmento representaba el 39,2% de los trabajadores, superando al conjunto de la industria manufacturera (27,8%).
Las exportaciones crecen un 4,4%
Las exportaciones de alimentación y bebidas en 2020 alcanzaron los 33.945 millones de euros, un 4,4% más que en 2019, especialmente impulsado por la demanda de China de productos cárnicos. La base de las empresas exportadores aumentaron un 1,3%.
Por mercados, la Unión Europea sigue siendo el principal destino y registra el 54,9% del total. Francia lidera el ranking europeo (4.915 millones de euros), seguida de Portugal (3.461 millones), Italia (3.440 millones) y Alemania (1.864 millones). Fuera de la UE, destaca el comportamiento del país asiático (3.725 millones de euros), que en la clasificación general se sitúa como segundo socio comercial. Le sigue Reino Unido (2.151 millones) y Estados Unidos (1.885 millones).
Fiab descarta las subidas de impuestos fiscales
Desde Fiab destacan el carácter estratégico de la industria de Alimentación y Bebidas en España, “imprescindible para impulsar la economía y liderar la recuperación”, ha señalado el director general de Fiab, Mauricio García de Quevedo, en la presentación del informe.
El director general ha recordado la importancia de que el sector acceda a los fondos europeos, recordando los siete proyectos de digitalización y sostenibilidad, además de insistir en mantener el equilibrio fiscal “descartando cualquier subida de impuestos con el objetivo de asegurar la competitividad de las empresa s una mayor renta disponible en el ciudadano que contribuya a la recuperación del consumo”.
Así, Fiab destacó la necesidad de llevar a cabo campañas de promoción que fomenten el consumo en canales más afectados durante la pandemia, como la hostelería y el turismo, además de promoción de los productos nacionales en el extranjero. En este contexto de necesaria recuperación, el director general insistió en promover “la unidad del mercado y evitar regulaciones autonómicas que resten competitividad a la industria y medidas de apoyo públicas para empresas que invierten en I+D+i y economía circular”. En esa línea, Fiab pidió que se aumente temporalmente la masa máxima autorizada de vehículos pesados de transporte de mercancías por carretera hasta las 44 toneladas para disminuir el impacto ambiental y mejorar la eficacia del abastecimiento.