«Los números que más importan tienen nombre”. Así decía el lema de los primeros anuncios de salida a bolsa de Bankia. Y creo que a todos nos gustaría saber los nombres. Desde mis inicios como periodista especializado en marketing y publicidad siempre se ha hablado de los maletines. Se comentaban y rumoreaban nombres, personas que recibían generosos regalos y maletines por parte de alguna agencia ganadora de la cuenta o el concurso. Pero pocas veces han salido a la luz de forma tan clara, algo que parece inevitable en una investigación judicial. Según publicó Fernando J. Pérez en El País el 20 de agosto, “Albisa abonó a Kradonara (controlada por Rato a través de una sociedad domiciliada en Gibraltar, Vivaway Ltd.) un total de 474.417 euros en 2011 y de 360.608 en 2012… Los técnicos de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), dependiente del Ministerio de Hacienda, sospechan que los pagos recibidos por la sociedad de Rato son una contraprestación por la adjudicación de dos contratos de campañas de publicidad por la salida a bolsa de Bankia en 2011. Albisa, la sociedad de Portuondo Coll, recibió en 2011 casi dos millones de euros de las centrales de medios Zenith y Publicis, a quienes el Consejo de Administración de Bankia, presidido por Rato, otorgó los dos contratos para la campaña de imagen de marca de Bankia y para la salida a bolsa de la entidad… Ambas firmas —intermediarios de publicidad entre los anunciantes y los medios de comunicación— recibieron de Bankia contratos superiores a 40 millones de euros durante la presidencia de Rodrigo Rato”.
El maletín del 5%. El 5% de 40 millones son 2 millones, que no está nada mal. Habrá que ver si Albisa puede justificar esos servicios prestados a Zenith y Publicis, y si Kradonara, la sociedad de Rato, justica lo que hizo a su vez para que Albisa le pagara tantos miles de euros. O simplemente se trata de maletines volantes que salieron, cómo no, del bolsillo de los accionistas de Bankia, y que hemos terminado pagando todos los españoles. Por cierto, el concepto creativo de la campaña de Publicis y Zenith era “Llamada a la acción”, y según la misma entidad, daba a conocer “los detalles del proceso de salida a Bolsa de la entidad y las ventajas de participar en el mismo”. Sobre todo para algunos, diría yo.
De la policía a la energía. El comunity manager que dirigía la estrategia y gestión en las redes sociales de la Policía Nacional, Carlos Fernández Guerra, ha sido fichado por Iberdrola para dirigir su nuevo departamento digital y de medios sociales. El reconocimiento a su buena labor ha sido unánime, pues además de lograr 175 millones de seguidores en la cuenta de la policía en Twitter, logró numerosos premios, incluyendo el último Gran Premio Nacional del Marketing. Ahora tendrá que lidiar con un cliente bastante más complicado, pues las compañías energéticas tienen una pésima imagen, creo que merecida, por sus continuas subidas de tarifas, la contratación de antiguos políticos con sueldos millonarios para sus consejos, su oscurantismo absoluto en las facturas, su radical oposición a las energías renovables mientras aseguran en la publicidad que apuestan por ellas, y tantos otros motivos. Frente a todo esto, unos chistecitos en Twitter no arreglan nada, e incluso pueden cabrear bastante si los lees al lado de la factura de la luz.
El timo Plus. Con la gran campaña anunciando Movistar+ en marcha, Facua advierte el timo que están sufriendo los abonados de Canal Plus que quieren darse de baja al modificarse las condiciones que tenían contratadas: ni Canal Plus ni Movistar se la aceptan ni tramitan, unos dándoles largas, otros diciendo que son empresas distintas. Más de un conocido lo está sufriendo, y les compadezco, pues Movistar tiene muchos años de experiencia en trucos para fastidiar a los clientes. Quizá hasta contraten a otro comunity manager estrella para mejorar su imagen en las redes sociales.
Fernando Montañés