Hoy hablaremos de dos soluciones informáticas que están logrando impulsar la productividad de PYMEs y multinacionales. Nos referimos tanto al ERP como al CRM de Microsoft. Antes de profundizar en ellos, describiremos cómo ha sido el proceso que ha llevado a tantas compañías a dar el paso de implementarlos.
La transformación digital: del discurso a la acción
No hay que echar la vista demasiado atrás para dar con una época en la que la digitalización a nivel empresarial era tan solo una tendencia. Es decir, algunos negocios la ponían en práctica y, tras obtener los beneficios esperados, otros se sumaban a esa corriente atraídos por esa posibilidad. Sin embargo, en pleno 2025 no es una moda como tal, sino una necesidad.
Hoy en día, para las empresas es crucial ofrecer un altísimo nivel de competitividad. En este sentido, surge una necesidad operativa que pasa por transformar digitalmente los negocios.
¿Por qué muchas empresas aún no han logrado digitalizarse de forma efectiva?
Ante una necesidad operativa tan importante, no es de extrañar que ingentes cantidades de empresas decidieran implementar soluciones informáticas como las que describiremos después. Sin embargo, en los momentos de escribir estas líneas, todavía se cuentan por decenas de miles los negocios que no se han digitalizado de manera efectiva.
Básicamente, esto es debido a una serie de barreras, empezando por el desconocimiento generalizado. En algunos casos, se implementan soluciones que dejan bastante que desear, ya sea por la falta de conexión con las demás o por ser poco intuitivas. A su vez, es habitual que los departamentos que forman parte de la empresa en cuestión no estén debidamente alineados.
El papel clave de los ERP y CRM en la productividad empresarial
Las empresas que sí han obtenido un buen resultado al digitalizarse son principalmente aquellas que decidieron apostar por dos softwares de un peso pesado de la informática. Hablamos no solo del CRM de Microsoft, sino también del ERP.
Respectivamente, estos acrónimos hacen referencia a un sistema de gestión de relaciones con los clientes y uno destinado a la planificación de recursos empresariales. ¿Sabías que ambos son clave para la productividad empresarial?
En primer lugar, es reseñable que muchos de los procesos que se llevan a cabo diariamente en una empresa pasan a automatizarse. Obviando el ahorro de tiempo, también se obtiene una drástica reducción de los errores cometidos, lo cual no sorprende si tenemos en cuenta que disminuyen las tareas manuales.
Por si fuera poco, tanto el ERP como el CRM permiten optimizar los recursos con los que cuenta la empresa. Adicionalmente, proporcionan información muy valiosa que pueden utilizar los responsables de los departamentos, así como los altos cargos, con el objetivo de tomar mejores decisiones.
Soluciones integradas para una empresa conectada: el ecosistema Microsoft
Aunque hay muchas compañías que desarrollan sus propios CRM y ERP, los más recomendables, sobre todo para las empresas que se encuentran en pleno crecimiento, son los de Microsoft. Y es que estamos ante un ecosistema, el de Dynamics, que es extremadamente beneficioso para este tipo de negocios.
Al ser escalable, puede adaptarse a las necesidades de las empresas en crecimiento que poco a poco irán a más. Además, se integra a la perfección con otras herramientas de las que suelen hacerse uso en las empresas, siendo un claro ejemplo la suite ofimática Office 365.
En lo que respecta al aumento de la productividad empresarial, el mejor ejemplo posible es el del ERP de Microsoft, ya que unifica la gestión financiera, amén de la logística y la operativa, con todo lo positivo que ello conlleva. Y es que los silos de información se eliminan al mismo tiempo en que se acelera la toma de decisiones de carácter estratégico.
CRM: el gran aliado para convertir datos en relaciones y ventas
Para que una empresa crezca y coseche éxito en su respectivo sector a pesar del alto nivel de competencia, es crucial gestionar a la perfección las relaciones con los clientes. Para tal fin, es muy útil disponer del CRM de Microsoft, puesto que todos los datos que recopila sirven para segmentar la audiencia y, por ende, lanzar campañas de marketing mucho más efectivas.
Adicionalmente, el CRM de Microsoft sigue el ejemplo del ERP en el sentido de que automatiza una gran cantidad de procesos, así como los análisis de la información relacionada con los clientes, quienes optimizan la fidelización de los mismos. En cierta medida, esto es fruto de anticiparse a sus necesidades.
¿Por dónde empezar? Claves para una digitalización efectiva y sin fricciones
A todos los beneficios del CRM que acabamos de mencionar hay que sumar otros como la optimización del trabajo comercial. De hecho, la lista de ventajas es extensísima al hablar tanto de esta solución como del ERP de Microsoft. Pero, ¿cómo obtenerlas?
Primeramente, es recomendable llevar a cabo un diagnóstico inicial. A continuación, llega el momento de elegir el partner tecnológico adecuado. Si eliges el más recomendable para tu caso en concreto, acertarás de lleno, aunque el proceso no habrá terminado. Todavía faltará la tarea de capacitación para que tus empleados puedan aprovechar al máximo las características y funcionalidades de ambas soluciones informáticas, las cuales finalmente deberán escalarse en caso de que surja dicha necesidad.
