La inflación no ha sido un impedimento para que los consumidores opten por quedarse en casa y no comer fuera, sino todo lo contrario. Pese a que Europa es el continente en el que sus habitantes experimentan más cambios de hábitos, la subida de los costes no paralizado que el Foodservice crezca hasta superar los tiempos anteriores a la pandemia mundial. En este sentido, los consumidores eligen comer fuera antes que preparar comida en casa, apunta el informe global de Kantar Worldpanel.
Mientras que el sector de la alimentación ha obtenido el 10% del crecimiento debido a la subida de precios, el Foodservice también ha crecido gracias a la comodidad y los precios adaptables a los bolsillos de los consumidores. Los menús sencillos, tener las opciones más económicas en los restaurantes de comida rápida y mayores alternativas de consumo rápido han sido los alicientes para que esta industria haya experimentado un crecimiento del 13% respecto al año 2022 y un 6% en lo que se refiere al crecimiento orgánico.
«[..] Desde restaurantes de comida rápida que reinventan sus menús hasta plataformas de delivery que transforman nuestros hábitos culinarios, los cambios son tan diversos como profundos», comenta Javier Sánchez, global business development director, Out-of-Home & Usage, de la división Worldpanel de Kantar. Por otra parte y pese a que tres de cada cinco consumidores de los 15.000 encuestados en 11 países han determinado que los gastos de envío a domicilio son demasiado altos, el 24% afirma que para no cocinar opta por coger comida para llevar. Esta opción resulta un 26% más barata que la entrega a domicilio.
En este sentido, la comida preparada ha aumentado en todo el mundo. En Reino Unido ha duplicado sus ventas desde 2021 y en China continental tienen un crecimiento las aplicaciones relacionadas con los deliverys. De esta manera, el informe de Kantar establece que en 2030, los restaurantes de comida rápida representarán el 32% del gasto total en Reino Unido. Francia y España, lugares en los que se ha incrementado a superar los niveles que existían antes de la pandemia. Sin lugar a dudas, la comodidad, los precios asequibles y la variedad de opciones son las claves para que los consumidores se decante por esta tendencia.
Conforme con esto, los restaurantes de comida rápida han registrado un crecimiento del 30% en 2023 en comparación con el 2019. La estrategia se ha basado en no establecer fuertes subidas de precio pese a la inflación existente. Esto ha dado pie a que la comida para llevar sea un método de supervivencia que permite lidiar con los costes. Por otra parte, los consumidores más jóvenes eligen salir a comer todos los días, pero este es un hecho que varía en función de las generaciones. La Generación X opta por pedir cenas los fin de semanas, mientras que la Generación Z pide entre semana y los Baby Boomers lo hacen para el almuerzo. Finalmente, las hamburguesas han ganado terreno a las pizzas al convertirse en el plato favorito de los consumidores de todo el mundo, a excepción de México.
