Un anunciante que decida incluir el vídeo de marca en su estrategia de marketing deberá aplicar diferentes parámetros a la hora de utilizar este canal, dependiendo de si busca notoriedad, conocimiento o engagement.
“No hay fórmulas mágicas sino trabajo bien hecho. Una vez determinados los objetivos, hay que elegir el formato de vídeo de marcaque mejor pueda llegar a cumplirlos. Existen cuatro formatos recurrentes que suelen utilizarse: explicativo de empresa, explicativo de producto, testimoniales y de consumer experience”, explica Marcos Luengo, vicepresidente de IAB Spain y CEO de ADman Media, compañía experta en distribución de vídeo de marca.
Explicativo de empresa
Explicar una nueva empresa no es tarea sencilla. Suelen querer comunicarse muchas ideas cuando lo más efectivo es transmitir un único mensaje. El vídeo presentación de la startup que envía cuchillas de afeitar a domicilio Dollar Save Club, no sólo comunica un único mensaje repetido de diferentes formas, sino que además lo hace de forma original y con humor.
Explicativo de producto / servicio
Pero no todo puede explicarse con ideas originales y un toque de humor. Cuando hay que explicar un producto nuevo, hay que proponer una buena solución a un problema. Y explicarla de forma sencilla y visual. Además, si como en el caso del vídeo de Mint, hay que convencer al usuario de que deje su contraseña de su cuenta en el banco y dé acceso a una app a todos sus movimientos financieros, el tema se complica. Pero hasta para eso hay una buena argumentación, tal y como demuestran en su vídeo.
Vídeo testimonial
La mejor explicación de una marca la hacen sus clientes. La era digital se traduce en el poder de los consumidores, y por ende, en el poder de las recomendaciones. ¿Por qué no utilizarlo? Si el objetivo de una marca es conectar con su público y transmitir unos valores, ¿qué mejor que hablar de igual a igual? Esta es la apuesta de Dove con su vídeo What is a Dove girl for you
Explicativo consumer experience
Pocas marcas reales pueden plantearse, en términos de presupuesto, una experiencia de consumidor como la de Pacman de Bud Light, pero también hay muchas otras que sí pueden y no lo hacen de una forma tan espectacular.
Un buen vídeo de consumer experience como este no sólo consigue que los participantes escogidos vivan una gran experiencia, sino que todos los que ven el vídeo (más de 21 millones de personas), ansíen igualmente vivirla. Y es que cuando un vídeo realmente impacta y sorprende, sea del tipo que sea, la conexión que se produce entre marca-consumidor sobrepasa fronteras.