Auxi Barea superó la prueba ideada por la agencia para seleccionar al responsable de su presencia en las redes y que consistía en pasar una noche en la inquietante sede de JWT, situada en la madrileña calle de La Palma, y en la que se suceden fenómenos extraños. El objetivo era contratar a alguien con “lo que hay que tener”.
Lo acontecido en esa noche de terror, que transcurrió del miércoles 11 hasta la madrugada del jueves 12, puede leerse en el wall de Facebook de JWT España.