LLYC ha publicado un informe sobre la percepción que tiene la conversación social sobre la empresa familiar. Se trata de el Primer estudio sobre la conversación social alrededor de la empresa familiar. Un informe que analiza 60 empresas españolas (30 familiares y 30 no familiares) durante un año y casi 420.00 mensajes en Twitter.
Las conclusiones del estudio revelan que apenas un tercio de empresas familiares son reconocidas como tal en la conversación. Lo que denota un gran desconocimiento por parte de la audiencia sobre la definición de empresa familiar.
Además este tipo de imagen resulta más positiva para los consumidores. Se posicionan con atributos como la cercanía, confianza, emprendimiento o vocación. Mientras que se alejan de otros como la innovación, tecnología, ciberseguridad o experiencia digital. La conversación es un 46% más positiva en territorios donde se habla de empresas familiares. Lo que revela una oportunidad para explotar el atractivo de simpatía.
Si un miembro de la familia actúa como portavoz, tiene resultados más positivos. Revela que humanizar la marca aumenta la simpatía hacia la marca, ya que donde participa al menos un miembro de la familia la conversación se vuelve más negativa.
El informe también aporta claves para transformar los atributos familiares en oportunidades de competitividad:
Definir y comunicar el atributo familiar. Es una fortaleza que se debe incluir en la narrativa de la marca.
Poner en valor el ADN. Como elemento de diferenciación, se vuelve muy relevante en la conversación social
Proteger el orgullo empresarial. La audiencia reconoce la empresa familiar como patrimonio español.
Incluir un portavoz que sea miembro de la familia. Está reconocido positivamente para la cercanía de la marca.
Activar la innovación. Las empresas familiares tienen dificultades a la hora de abrirse a nuevas iniciativas, LLYC anima a poner en conocimiento lo que se está produciendo dentro de la compañía. De esta manera, se muestra un espíritu innovador.
