La Asociación Española de Anunciantes (aea) presentó el pasado mes de diciembre un recurso contencioso administrativo contra la Resolución del 26 de octubre de 2015, de la Setsi (Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información), que adjudicaba seis licencias de nuevos canales de TDT.
Tres licencias de las adjudicadas, en tecnología de alta definición, recayeron en Mediaset, Atresmedia, y Real Madrid y las otras tres, en definición estándar, fueron otorgadas a la productora Secuoya, Radio Blanca (Kiss TV) y 13 TV (canal gestionado por la Conferencia Episcopal).
En opinión de la aea, en la adjudicación del concurso no se han tenido en cuenta dos de los aspectos más importantes del panorama de medios actual en España, por un lado la excesiva concentración de la oferta en dos grupos mediáticos, formando un duopolio que aglutina más del 86% de la inversión publicitaria. Y por otro que ambos grupos han sido sancionados por las autoridades de competencia por el incumplimiento de los compromisos que asumieron en su día para que dichas autoridades de competencia autorizaran sus respectivas fusiones.
A este respecto, la Asociación Española de Anunciantes considera que aumentar el peso de los dos principales grupos no favorece la competencia e imposibilita de facto la supervivencia de los competidores actuales, al mismo tiempo que impide la consolidación en el mercado de los competidores entrantes.
Así mismo, en el comunicado remitido a la prensa, la aea señala que no tiene sentido que la misma autoridad que sanciona por grave incumplimiento a una cadena de televisión por contravenir repetidas veces las condiciones y compromisos de dichas fusiones, premie a este conglomerado de poder con la adjudicación de nuevos canales que incrementan aún más su posición de dominio en el mercado.
“No podemos ignorar como criterio de adjudicación de los nuevos canales el hecho de que existe un histórico de incumplimientos de la legislación vigente en materia de tiempos de emisión de publicidad, franjas de horarios protegidos, publicidades encubiertas, etc., que va en detrimento de la inversión publicitaria”, señalan.
Desde la Asociación Española de Anunciantes opinan que tras la eliminación de la publicidad en TVE, el poder de los grandes grupos ha ido en aumento sin favorecer la calidad del medio sino que, al contrario, la inversión cautiva ha desembocado en una falta de calidad de la programación, que no solo es negativa para la eficacia de las campañas publicitarias sino que perjudica seriamente al consumidor, restringiendo las opciones de pluralidad de contenidos y servicios audiovisuales que permite a la TDT. “La presencia de nuevos operadores aportaría más oportunidades de programación con una oferta más diversificada en áreas que actualmente están siendo cubiertas por las cadenas de pago o de titularidad estatal o autonómica”.