Ubicado en el sureste africano, Mozambique es un destino bastante desconocido para los turistas, que sin embargo, si tienen referencias negativas (guerra, violencia, pobreza…) asociadas al pasado del país y que no responden a su presente.
La idea era despejar estas percepciones erróneas para destacar Mozambique como un destino absolutamente seguro y con una oferta que incluye la aventura, la historia o el relax. Para ello se han destacado valores como la humildad, la generosidad y el carácter práctico y mágico del país, capaces de llegar a diferentes públicos objetivos (turistas nacionales, internacionales y aventureros).
En cuanto a la identidad visual, Interbrand ha escogido como distintivo la caracola, un elemento natural que expresa el carácter exótico de Mozambique. La elección cromática hace alusión las características del propio país: azul, verde, amarillo, rojo y naranja.