El impacto del ciclo económico que atrvesamos es, de acuerdo con el estudio, el causante de esta actitud en unos consumidores que, sin embargo, opinan, en un 60% de los casos, que la RSE debe ser una prioridad en la gestión empresarial. Ante la crisis el ciudadano muestra una actitud más restrictiva ante la RSE y el peso de los aspectos éticos, sociales y ambientales se ve desplazado por las preocupaciones relativas a la economía familiar.
Uno de cada cuatro españoles conoce perfectamente el concepto RSE y el 54% (un 8% más que en 2006) percibe mejoras en las prácticas empresariales respecto a la sociedad y el medio ambiente.
Por segunda edición consecutiva, el informe revela que “el nivel sociocultural guarda una relación directa con la sensibilización y conocimiento de la RSE”. La población con un nivel más bajo de educación y renta vive ajena a este fenómeno y siete de cada 10 ciudadanos de clase media-baja no han oído nunca hablar de RSE. Entre la población de clase media y media-alta con estudios superiores, el nivel de conocimiento es del 53% y el 56%, respectivamente. Según Juan Pedro Galiano, codirector del estudio y vicepresidente de Forética, estas cifras confirman que la RSE sigue siendo un “fenómeno ilustrado” y que esa es una de las principales causas de que no crezca el número de ciudadanos sensibles a estos temas.
Ventajas competitivas. Para las empresas, la RSE constituye una fuente de ventajas competitivas y siete de cada 10 compañías considera queso importancia será mayor en los próximos años. Por ello, cada día son más las empresas que están empezando a crear el puesto específico de director de responsabilidad social. Desde 2006 ha aumentado en más de un 20% la aparición de este tipo de ejecutivos, que en su mayoría dependen del primer nivel directivo de las compañías.
De acuerdo con el informe, el 90% de las empresas con más de 500 empleados conocen perfectamente el término RSE. Por el contrario, dentro del mundo de las pymes hay un 46% de compañías que permanecen ajenas a estos aspectos.
Forética es una asociación sin ánimo de lucro dedicada a fomentar la cultura de la gestión ética y socialmente responsable en las organizaciones. Las empresas promotoras de Forética son Adif, AstraZenéca, Caja Navarra, Ferrovial, Fundación Solidaridad Carrefour, Grupo Cofares, Grupo Hospital de Madrid, Grupo Norte, MSD, Novartis, Renfe, Sanitas, Sanofi-Aventis y Unión Fenosa.