Estamos por tanto ante un doble aniversario que, sin duda, merece la pena celebrar.
Siempre he sabido ver, y no soy el único, el enorme valor de una asociación como la nuestra, sí, y digo la nuestra porque la financiamos entre todos, la propia industria publicitaria. Su creación supuso un gran cambio en el modelo de organización de la investigación de audiencias en España.
En estos cuarenta años, gran parte de la historia de los medios de comunicación, sobre todo, en lo referido a los hábitos de frecuentación y consumo de medios, se ha escrito a través del EGM y para muchos de nosotros, que cuando empezamos a trabajar en esto ya existía el estudio, estoy convencido de que ha sido parte de nuestro aprendizaje y crecimiento profesional. Creo que no podríamos entender este mercado sin el EGM, al igual que hoy en día no entenderíamos la televisión sin un sistema de audiometría. ¡Y que decir de Internet o de la telefonía móvil! Pues bien, todo ello forma parte de nuestro entorno, el de la comunicación, y es ahí donde tanto la AIMC como el EGM han sabido evolucionar y dar respuesta a un mercado tan ágil y cambiante como es el nuestro.
Han sido muchos los hitos relevantes a lo largo de estos años, pero para no caer en la nostalgia mencionaré sólo dos, los que representan de alguna manera presente y futuro de la asociación.