La empresa propietaria de DYC y Larios cuenta su estrategia para competir en uno de los mercados más duros y dinámicos

Rhona Martin es la directora de marketing de Beam Global España, la tercera compañía del sector de bebidas espirituosas por

Rhona Martin es la directora de marketing de Beam Global España, la tercera compañía del sector de bebidas espirituosas por volumen de facturación, y propietaria de algunas de las marcas más potentes y clásicas de nuestro país, como DYC, Larios, Terry o Anís Castellana, junto a otras importadas como Tequila Sauza, Marker’s Mark, Jim Beam o Courvoisier. En un sector altamente competitivo y con enormes restricciones legales a su comunicación, Martin está convencida de que lo que podría verse como un problema supone en realidad una gran oportunidad para innovar constantemente y buscar las mejores formas de llegar al consumidor. “Aunque mañana pudiéramos anunciarnos en televisión, no creo que fuera la mejor respuesta”.

Beam Global España ha apostado fuertemente en los últimos años por modernizar Larios, líder de ventas en ginebra, y DYC, que, después de ser líder absoluto en whisky durante décadas, se mantiene entre los más vendidos y conserva el primer puesto en Madrid y grandes zonas de España. Precisamente, la compañía está preparando acciones para celebrar el 50 aniversario de DYC, además de actualizar totalmente el packaging de las botellas y lanzar un malta de alta calidad a un precio asequible, una de las características clave de la marca. Pero no son las únicas novedades e innovaciones, pues compite en un sector que precisa constantemente de nuevas ideas para llegar a los consumidores con eficacia.

¿Cómo definiría la situación del sector de bebidas espirituosas? ¿Está afectando mucho la crisis?
A finales del 2005, mucho antes de la actual crisis, ya se notaba una bajada del consumo de bebidas espirituosas. Responde a muchos factores, como la inflación de precios en hostelería; una legislación creciente y más restrictiva en los horarios de apertura de bares; un cierto cambio de mentalidad hacia una mayor responsabilidad en el consumo; el carnet por puntos y una mayor conciencia de que si se bebe no se puede llevar el coche; la tendencia a un mayor cuidado de la salud