Son más de 500.000 los rumanos que trabajan en España. Constituyen la comunidad extranjera más numerosa de este país pero sin embargo es poco conocida por los españoles. De hecho, su imagen se ve muy perjudicada por la forma en que los medios de comunicación difunden mensajes negativos asociados a este colectivo.
La campaña que ahora promueve el Gobierno rumano pretende contrarrestar esta visión sesgada y dar a conocer otra realidad, la de los miles de rumanos que viven totalmente integrados en nuestro país contribuyendo son su trabajo al crecimiento económico de España.
Las expulsiones de los rumanos de etnia gitana en Italia el pasado verano y su repercusión en todos los medios europeos aceleraron el interés del Gobierno de Rumanía por iniciar una serie de acciones de comunicación que trasladaran una imagen correcta de los inmigrantes rumanos en los países receptores, en concreto en España.
Saatchi & Saatchi resultó la agencia elegida para crear la campaña De igual a igual que ahora se lanza en nuestro país y que se dirigirá tanto al público español como al colectivo rumano durante los próximos tres meses. Además de corregir esa tendencia de los medios a reflejar solamente los errores cometidos por algunos de los integrantes de este colectivo, la campaña también pretende generar simpatía y estrechar lazos entre los rumanos y la sociedad española, destacando la similitud de sus orígenes culturales, la contribución económica de estos inmigrantes y su gran capacidad para integrase en nuestra sociedad.
La agencia ha creado tres spots de televisión y varias piezas gráficas que bajo el lema Hola soy rumano recrean las historias reales de tres inmigrantes que llegaron a España en busca de trabajo y que tras un período de esfuerzo han logrado un espacio en el que desarrollarse procesionalmente. Una enfermera, un administrador de un hotel y un agricultor protagonizan los tres testimoniales.
El plan de medios incluye televisión, prensa y otros medios convencionales. Además de la puesta en marcha de la web www.holasoyrumano.es, la campaña contempla otro tipo de acciones paralelas, como el rodaje de un documental sobre el perfil del inmigrante rumano dirigido por Carlos Iglesias, actor y director de la película Un franco, 14 pesetas, en la que se reflejaban las experiencias de los españoles que emigraron en los años sesenta y setenta, y la realización de un estudio por la Universidad Juan Carlos I y dirigido por el profesor Ramón Tamales sobre los aspectos socio-económicos del colectivo rumano. También se han organizado mesas redondas y encuentros entre empresarios para favorecer las relaciones comerciales entre ambos países y viajes para periodistas a fin de ofrecer una visión fidedigna de la realidad rumana. Por último, Madrid y Castellón, ciudades en las que hay numerosos colectivos de inmigrantes rumanos, acogerán dos encuentros populares en los que se mostrará lo mejor de la cultura, la gastronomía y el arte del país transilvano.
Saatchi & Saatchi se adjudico este proyecto tras competir en un concurso público internacional en el que también participaron las agencias italianas SC Playteam, SC International Strategic Communication y SC Ars Advertising.
El equipo de Saatchi & Saatchi que ha trabajado en la campaña lo integran Ángel Canales, director de cuenta; Miguel Roig, director creativo ejecutivo; Pablo Dachefsky, director creativo; Javier Valenzuela, director de arte; Jonay Sosa, redactor; Elena Llagostera y Rodrigo Mayo, ejecutivos de cuentas; Emilio Pila, planificador de nuevos medios; Blanca Pallás, ejecutiva de nuevos medios; Isabel de Salas, planificadora estratégica; Gonzalo Samper, responsable de producción audiovisual, y Goyo Gómez, responsable de producción gráfica.
ANA EGIDO
Los rumanos son bien vistos
Synovate fue el instituto encargado de realizar una investigación cuyos resultados han servido de fundamento a la estrategia de comunicación de esta campaña.
El estudio, que se realizó en Madrid y Valencia, comunidades con un mayor número de inmigrantes rumanos, revela que el 71% de los encuestados reconoce que los trabajadores rumanos aprenden el idioma español más rápido que otros extranjeros y, por tanto, logran integrarse con mayor facilidad.
Dentro del ámbito laboral, el 40% de los consultados opina que los rumanos son muy “buenos trabajadores”, mientras que un 50% los califica como “buenos”. El restante 10% se divide entre los indiferentes y los que no saben nada al respecto. Así mismo, el 63,2% señala que los trabajadores procedentes de Rumanía tienen una mejor preparación profesional que otros extranjeros.