Elon Musk, reconocido como el hombre más rico del mundo, se muestra imparable en lo referente a los temas políticos y tecnológicos. Como CEO de Tesla, el mayor fabricante de coches eléctricos considerada una de las compañías con mejores datos de conducción autónoma, ahora implementará en ellos un chatbot creado con IA.
Se trata de Grok, un chatbot que lleva unos meses en X y que servirá de competencia a las funcionalidades de ChatGPT en modelos como Stellantis, General Motors y Volkswagen. De esta forma, al implementar la IA, Elon Musk no sólo logra mejorar el control del vehículo con la voz, sino también establecer una experiencia de cliente mejorada en la que, a modo de ejemplo, el usuario pueda pedir información sobre un restaurante determinado.
Aunque no se sabe si esta incorporación traerá datos positivos para Tesla, Elon Musk sigue mostrando su favoritismo por el coche eléctrico a través de X al decir que «los coches de gasolina con cambio manual serán como montar a caballo» haciendo referencia a que en un futuro se van a quedar obsoletos.
X, la red social que ha perdido la confianza de las marcas
Por otra parte, tras comprar Twitter en octubre de 2022, el futuro de esta red social se ha visto cuestionado al ser considerado para muchos usuarios y marcas un lugar en el que todo parece valer y ninguna información es 100% fiable. Según afirman algunos expertos, esta supuesta de libertad de expresión, optimiza el beneficio económico tanto del propio Elon Musk como de simpatizantes de la talla de Donald Trump.
Estos hechos dieron a que paso previamente a la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, compañías como Global Alliance for Responsible Media (GARM), grupo que reúne a marcas responsables del 90% del gasto publicitario mundial, quisieran dejar de publicitarse en X (antes Twitter).
Además, hubo marcas que quisieron reducir un 70% sus ingresos publicitarios al ver el aumento de desinformación y los discursos de odio que residen en X. En base a todo esto y según documentos del The New York Times, los ingresos en 2024 de esta red social se situaron en los 114 millones de dólares en Estados Unidos en el segundo trimestre y hubo una caída del 25% en relación al primero cuando en 2021, un año antes de la adquisición de Elon Musk y el cambio de nombre a X, Twitter logró unos beneficios de 1.190 millones de dólares y 1.050 provenían del negocio publicitario.