La manzana de Adán

¿Pero cómo conseguir ese punto que nos hace diferentes? Un producto es siempre una combinación de elementos tangibles e intangibles,

¿Pero cómo conseguir ese punto que nos hace diferentes? Un producto es siempre una combinación de elementos tangibles e intangibles, que satisfacen una o varias necesidades. Como por ejemplo el sentirse moderno y saciar la sed.

¿Cuál es nuestro primer contacto como consumidores con él? En el lineal y después… en casa. Ahí es donde queremos que esté nuestro producto. Queremos que el consumidor lo compre, le convenza, satisfaga sus expectativas, se sienta como creía que este producto le haría sentir. Queremos que el packaging le guste, le cautive, decida su compra. Ahí empieza una bonita historia de amor. Porque mientras disfrutamos del producto, el diseño de packaging sigue construyendo los valores de la marca. Sigue ayudando a fidelizar la marca.

¡Qué fácil lo tuvo el de la manzana de Eva!
Si hoy lo tuviera que repetir seguro que estudiaría la categoría, miraría a la competencia, analizaría bien los mensajes que quiere transmitir, cómo captar a nuestro Adán…; trabajaría para darle lo que busca. Y seguro que no dudaría en innovar. Podría recurrir a nuevas herramientas de comunicación impensables hace unos años. Hoy todo es posible. Nada puede detener a la creatividad cuando de diseño de packaging se trata.

No debemos olvidar que el packaging es un canal de comunicación relevante, del que ya ninguna marca puede prescindir. El imparable avance tecnológico nos está permitiendo incidir más en este aspecto. Hoy más que nunca la diferenciación es necesaria. El consumidor quiere nuevas emociones. Hagamos que las tenga. Más de 70% de las decisiones de compra se toman en el punto de venta. Hay que llamar la atención. Las marcas deben trabajar por ser reconocibles por el consumidor al instante, deben tener personalidad propia. No hay que tener miedo.

Si hoy Eva nos contratase seguro que aspectos como la conciencia medioambiental, sin duda uno de los elementos que más visibilidad puede tener en el diseño de packaging, y un buen storytelling teniendo en cuenta el valor de la emoción y la gamification, nos ayudarían a que Adán mordiese de nuevo la manzana. 
Ayudemos a crear marcas diferentes.