Durante el proceso creativo de la campaña, el equipo de la agencia se personó en diversos hogares para ver in situ qué sucede en España a la hora del desayuno y cómo la situación actual está afectando a las familias. Según cuenta José Luis Salazar, director de servicios al cliente de Bassat Ogilvy, “en los desayunos se percibe que, aunque la crisis haya tocado de lleno al hogar, las familias luchan por abstraer a los más pequeños de la dura realidad y mantener los detalles que ayudan a sobrellevar la situación económica”.
Para reflejar esta realidad, el spot central de la campaña muestra a niños jugando mientras el audio dice que “cuando David haya crecido, alguien le explicará el significado de la palabra recesión”. El anuncio se cierra con el eslogan “Los tiempos cambian, pero las cosas importantes siempre estarán ahí”.
La campaña se va a difundir en televisión, Internet y exterior a lo largo de todo este año.