En total, la industria del lujo moverá este año 212 mil millones de euros, cifra que supone un crecimiento del 10% respecto a 2011. Concretamente, en los últimos tres meses del año, coincidiendo con la temporada vacacional navideña, se espera un incremento del 7% en relación con las Navidades pasadas.
Este es ya el tercer año que, a pesar de la crisis económica, los ingresos de los sectores de bienes de lujo experimentan crecimientos anuales de dos dígitos. Asia-Pacífico es el área en el que las previsiones son más altas, con incrementos de hasta el 18%, impulsados por China. En América también se esperan grandes resultados para las marcas de lujo, que verán crecer sus ingresos hasta un 13% a finales de año.
El crecimiento en Europa, por el contrario, se reducirá a la mitad del año pasado, fijándose en un 5%.
Por otro lado, Bain & Company estima que este mercado crecerá, en términos reales, entre un 4 y un 6% anual entre 2013 y 2015, alcanzado un volumen de negocio de entre 240 y 250 mil millones de euros a mediados de la década.
No obstante, los autores del informe advierten de que existe preocupación ante un posible debilitamiento de esta industria. Aunque afirman que dicha cautela es exagerada, apuntan que se detectan grandes diferencias en cómo las distintas marcas de lujo se están adaptando a los cambios demográficos, de mercado y también en los gustos de los consumidores.
El consumo voraz de China
Los consumidores chinos siguen siendo el principal motor del mercado del lujo: crecen las ventas nacionales y también su gasto, que los autores del estudio califican de voraz, como turistas. En manos chinas se concentran ya la mitad de las compras de lujo en toda Asia, y casi una tercera parte de las europeas.
En este sentido hay que destacar que los turistas generan ya un 40% del gasto global en lujo. El gasto en turismo y en lujo están cada vez más estrechamente ligados.
En cuanto a las categorías más pujantes de la industria del lujo, los accesorios se han convertido en la categoría principal de los artículos de lujo personales. Así. Los productos de piel y el calzado son ya la parte más importante del mercado, con un 27% de las ventas, impulsados por los crecientes niveles de gasto masculino.
El informe también anuncia un cambio generacional en curso: los consumidores jóvenes buscan experiencias muy diferentes al consumo de lujo, buscando singularidad por encima de patrimonio y exclusividad. Según Claudia D’Arpizio, socia de Bain & Company “las estrategias en las que se basaban las marcas para ganar en el pasado no tendrán ninguna conexión con los segmentos que más peso cobrarán en la segunda mitad de la década”.
El informe complete Luxury Goods Worldwide Market Study puede consultarse en https://ipmark.com/pdf/lujo_2012.pdf