Nunca se tiene una segunda oportunidad para causar una buena primera impresión

Óscar Méndez (Socio Director de Presentalia)

En una época como la actual, en la que la competencia para conseguir nuevos proyectos es cada vez mayor, resulta necesario contar con herramientas que ayuden a diferenciar unas propuestas de otras. Una de las mejores alternativas para hacerlo y comunicar unos valores concretos es elaborar una buena presentación, una tarea en la que se han especializado en Presentalia. “De esta manera, las empresas pueden centrarse en otros aspectos dejando la tarea creativa a unos profesionales que pondrán estilo a sus ideas, siempre adaptándose a los objetivos y al público al que van dirigidas”, explica Óscar Méndez, Socio Director de Presentalia. Y lo harán con todos los recursos a su alcance: desde vídeos a las clásicas presentaciones de PowerPoint, un software que, bien usado, se aleja de las antiguas presentaciones de diapositivas para convertirse en una aplicación de cuidado diseño con todo tipo de contenidos de imagen, audio y vídeo. Esta estrategia, que funciona con cualquier meta (conseguir un nuevo cliente, exponer una cuenta de resultados…), también lo hace con cualquier tipo de empresa, incluyendo grandes corporaciones internacionales o pequeñas compañías españolas.

Presentalia, que lleva ya ocho años trabajando para mejorar las presentaciones profesionales, basa su éxito en la simplificación de las ideas para que la audiencia recuerde sólo los puntos que interese destacar en cada momento.
¿Cuándo y dónde surgió la idea de crear una empresa como la vuestra?
En más de veinte años como creativo de agencias multinacionales nunca vi a mis compañeros competir por quedarse con las presentaciones corporativas o por cualquier otro encargo que el gran público nunca pudiese ver; siempre preferíamos la parte jugosa de la campaña. Eso es una señal inequívoca de que algo no se estaba haciendo bien y, por ello, un grupo de publicitarios decidimos crear Presentalia: una compañía dedicada exclusivamente a presentaciones de empresa, apoyándonos en todos los avances tecnológicos que contribuyen a mejorar su imagen y el aspecto de las presentaciones profesionales. Podíamos hacer lo que fuera para que el empresario diferenciara su propuesta y, sobre todo, sin los tremendos costes de antes. Aprendimos rápidamente a valorar la audiencia, más por su calidad que por su cantidad, y aunque nuestro reconocimiento no sería público, se basaría en la fidelidad del cliente.

¿Cuál es la filosofía de Presentalia?

¿Qué hace contagiosa una idea? ¿Qué hace grande una presentación? Creemos que la respuesta está en el equilibrio entre contenido y estilo. Presentalia es tan solo el narrador que pone estilo a las ideas del cliente.

Desde 2004 le ayudamos a contar mejor sus historias, y ayudamos a las empresas con grandes ideas a través de presentaciones que convencen, inspiran, expresan, cautivan, mueven, enseñan, entretienen, venden, contratan, desafían y motivan al público. Nuestra filosofía es clara: sencillez en la expresión. Así, la audiencia recordará únicamente las claves que nos interesan.

¿Cómo fueron vuestros comienzos? ¿Qué habéis aprendido desde que estáis trabajando en este sector?

A pesar de que existían empresas similares muy consolidadas en Estados Unidos o Gran Bretaña, en España fuimos pioneros innovando sobre un territorio demasiado amplio por opciones y posibilidades tecnológicas. Pero ha sido el propio mercado, con su increíble buena acogida, el que se ha encargado de encauzar nuestra actual oferta de servicios.

Durante nuestros años de experiencia hemos aprendido que cada presentación es un mundo, y lo primero es analizar las múltiples variables antes de dar nuestra recomendación. Por ejemplo, si hablamos del gran evento ante accionistas, inversores o distribuidores, la experiencia nos dice que siempre va a haber cambios de última hora, y tenemos que contar con herramientas lo suficientemente ágiles para solucionar esos posibles problemas. Algo parecido ocurre con las presentaciones comerciales: si afirmamos que cuando un catálogo convencional entra en imprenta ya está obsoleto, nosotros tenemos que ser capaces de actualizar cualquier información en menos de 24 horas. Un planteamiento totalmente distinto es el que se da con una presentación institucional, en la que nada debería cambiar a corto plazo. Y aunque las opciones tecnológicas se disparan, el rey sigue siendo el PowerPoint.

¿Entonces es éste el formato de presentación más demandado? Da la impresión de que por sus características no cumple vuestro principio de sorprender o motivar a una audiencia habituada a manejarlo.

El PowerPoint es un gran desconocido precisamente porque todos lo tenemos en el paquete Microsoft Office (o su versión Mac, Keynote). Sin embargo, como ocurre con la mayoría de programas, el 99% de los usuarios no llega jamás a desarrollar ni la mitad de su potencial. Tan solo con auténticos técnicos especialistas que le saquen todo su partido se consigue el máximo impacto: PowerPoints avanzados, de cuidado diseño y que además incluyan voces, flash, transiciones espectaculares y animaciones que hacen olvidar a la audiencia las antiguas presentaciones de diapositivas.

¿Varía el formato de Presentación en función del objetivo que se persigue?

Hay que estar en continua actualización para seguir ofreciendo una gran variedad de formatos de presentación, siempre en función del objetivo asignado. Nuestro innovador modelo de servicios de presentaciones permite abordar cualquier meta propuesta: desde conseguir un cliente o exponer la cuenta de resultados, a un proyecto único para alcanzar cualquier objetivo. Estos son múltiples aunque lógicamente son las herramientas comerciales interactivas los trabajos que más interés despiertan en la actualidad.

¿Algunos gestores podrían considerar un lujo invertir ahora en servicios que puedan parecer no imprescindibles?

Ana Conde e Ignacio Miner (Directora de Cuentas y Director de Desarrollo de Presentalia, respectivamente)

Lo que considero un lujo actualmente es conseguir un nuevo cliente, y nunca se tiene una segunda oportunidad de causar una primera buena impresión. En tiempos de feroz competencia, la presentación es la mejor herramienta para comunicar nuestros valores. No pueden seguir dejándola en manos no expertas. El empresario hoy no puede permitirse fallar.

Entonces, ¿cuáles son en tu opinión los beneficios que obtiene una empresa al trabajar con vosotros?

La clave del éxito está en las ventajas ya reconocidas de la externalización de procesos. Así, nuestros clientes se centran en los aspectos que aportan mayor valor a su negocio y a su desarrollo, sin necesidad de contratar personal especializado en presentaciones, confiando esta tarea a Presentalia.

Si una empresa acude a vosotros para que les ayudéis con una presentación, ¿cuáles son los pasos a seguir?
Como señalaba anteriormente, nuestra misión es ser el narrador que pone estilo a las ideas del cliente. La gran mayoría sabe lo que debe contar, por lo que nosotros, además de vestir la presentación, nos limitamos a asesorar y corregir los aspectos formales de la misma. Por supuesto recibimos también encargos sobre briefing donde es preciso desarrollar una estrategia completa de presentación desde el inicio, aunque no es la práctica más habitual. Una vez determinado cada caso, a cada trabajo se le asigna un responsable de cuentas que supervisa la labor de un Director de Arte que, en nuestro caso, siempre trabaja con Técnicos responsables de que todo funcione correctamente.

¿Cuáles han sido vuestros proyectos más destacados y cuáles tenéis previstos de cara al futuro?

Trabajamos con compañías entre las 10 primeras del ranking mundial y otras que son líderes en nuestro mercado nacional, pero también con pequeños emprendedores que tienen mucho que decir en el nuevo panorama económico, y en prácticamente todos los sectores. En definitiva, cubrimos las necesidades de presentación de cada cliente, sin importar su tamaño, con una ejecución de máxima calidad que rentabiliza al instante su inversión y ofrece valor añadido. Los detalles, cara a cara.

Óscar Méndez, Socio Director de Presentalia.