A pesar de una mayor conciencia empresarial por la sostenibilidad, todavía un 61% de compañías no han dado los pasos necesarios para adaptar e incorporar la sostenibilidad en su estrategia corporativa. Y lejos de incrementar su partida de inversión en esta materia, un 19% de estas compañías afirma una disminución o inclusa una nula dedicación en materia medioambiental.
Son datos del último estudio de SAP, sobre la percepción que tienen las empresas a nivel global con respecto a la sostenibilidad y los efectos de su incorporación a la estrategia corporativa en materia de beneficios y competitividad.
El estudio divide a las organizaciones en Actuales – el 17% de encuestados, aquellas que ya perciben que la sostenibilidad tiene efectos en la situación financiera y en el rendimiento del negocio y están consiguiendo mejores resultados-; Inminentes – un 22%, que esperan ver esos efectos en un plazo de cinco años-; y Tardíos – un 61% que todavía no ha dado los pasos necesarios-.
Las empresas consideradas Actuales se caracterizan por que la sostenibilidad viene impulsada por los líderes de la organización. El compromiso del CEO y la junta directiva, las regulaciones gubernamentales, el propósito de la empresa, el compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y las oportunidades de crecimiento de ingresos y ganancias son los principales factores que impulsan la sostenibilidad en este tipo de compañías.
De igual modo, son las que más invierten en materia de medioambiente y las más dispuestas a incrementar esas inversiones. Un 44% frente a un 41% de las empresas Inminentes y el 30% de las Tardías.
En cuanto a la relación entre la competitividad a largo plazo de las empresas y la sostenibilidad medioambiental, el 68,2% de las Actuales considera que se da una relación positiva, frente al 61,7% de las Inminentes y el 49,2% de las Tardías.
Falta de calidad en datos medioambientales
El mayor avance de las empresas Actuales en materia de sostenibilidad origina que estas reúnan un mayor volumen de datos sobre su negocio y el impacto medioambiental que deja. Una información que, tal y como recuerdan en el estudio, les permite una mayor visibilidad para anticipar mejores resultados de negocio e implica que reconocen el valor de los datos de sostenibilidad a la hora de tomar decisiones estratégicas y operativas.
No obstante, en general, las compañías se muestran insatisfechas con la calidad de los datos que recopilan sobre sostenibilidad medioambiental. De hecho, los consideran la principal barrera para actuar en este ámbito. Aunque esta insatisfacción es menor en el caso de los Actuales ante la mayor recogida de datos que practican – un 44% de estas empresas lleva más de cinco años recopilando información, frente al 34% de las Tardías y el 20% de las Inminentes-.
Las operaciones y la estrategia también se posicionan como desafíos a la hora de adaptar la sostenibilidad al rumbo empresarial. En concreto, las firmas encuestadas señalan no tener claro cómo deben incorporar la sostenibilidad a los procesos y sistemas; tampoco cómo alinear sus esfuerzos con la estrategia de negocio; ni cómo probar el retorno de la inversión (ROI) de la sostenibilidad.