El Corte Inglés comprometida en garantizar los más altos estándares de calidad, trazabilidad y seguridad en sus productos y servicios, realizó el año pasado más de 30.000 controles, auditorías y ensayos en sus diferentes divisiones de negocio. A cierre de 2019, la compañía española había realizado más de 12.700 verificaciones en artículos de gran consumo.
En su división de distribución, el gran almacén realizó 1.786 análisis de productos de marcas propias en laboratorios de la empresa y externos, requisito “imprescindible para forma parte de la oferta comercial del grupo”. La compañía lleva a cabo controles y monitorización en toda la cadena de suministro, desde las instalaciones, procedimientos hasta los artículos que llegan al lineal. En el caso de la marca blanca de alimentación, se trabaja bajo los estándares de GFSI (Global Food Safety Initiative).
Más de 6.400 ensayos en textil
En textil, El Corte Inglés cuenta con una ‘Política de Aseguramiento de la Calidad’, de la cual se establecen los distintos procedimientos a realizar, siguiendo, además, el reglamento de ‘Registro, Evaluación, Autorización y Restricción de Sustancias Químicas (Reach)’. En concreto, en 2019, el grupo realizó más de 6.400 informes para comprobar la calidad de prendas, artículos textiles y calzado.
Etiquetas de seguridad en juguetes
En el caso de marcas propias de juguetes, productos del hogar y electrodomésticos, cada gama cuenta con un dossier que recoge todos los ensayos y certificados que deben avalar la seguridad de los mismos basados en la normativa europea. En juguetes, se incluyen los artículos destinados a público infantil, que, tras el estudio de su uso previsible, se considera que puedan ser atractivos y convertirse en juego para ellos.
Además, la división de juguetes está involucrada en el proyecto de etiquetado Icontoys, en colaboración con un laboratorio tecnológico. Los artículos muestran mediante sencillos iconos la información que necesita el consumidor para elegir el producto que más le conviene, como, por ejemplo, indicaciones sobre seguridad y capacidades que pueden desarrollarse en los niños que hacen uso de esos artículos.
Con la nueva ‘normalidad’, El Corte Inglés ha implantado nuevos procedimientos para adaptarse a la exigencia del reglamento que establece los requisitos sobre el diseño y fabricación de equipos de protección individual (EPI), que afecta a productos de diferentes secciones, como cascos, prendas de protección solar, deportivos, entre otros.