Si los protagonistas de pinturas clásicas como La Mona Lisa o La Joven de la perla levantaran la cabeza, descubrirían que no solamente siguen siendo admiradas en los museos, sino que también han llegado a la famosa app de citas, Tinder. El objetivo no ha sido otro que incentivar, con esta ocurrencia creativa, a que los usuarios se vean tentados a mejorar sus biografías para dejar en claro cuáles son sus verdaderos gustos y pretensiones.
Está conocida aplicación que consiste en intentar hacer match con una persona que ha resultado de interés revela, a su vez, que una buena biografía debe tener entre 15 y 45 palabras que engloben a la perfección qué buscas en una relación y qué aspiras obtener. En un estudio realizado, Tinder demuestra que el 45% de los solteros de entre 18 y 24 años prefieren que su match deje en claro lo que quiere en su biografía. Por otra parte, mientras que el 40% busca una relación estable, el 13% sólo espera pasárselo bien y no formalizar nada.
Si bien como ya se ha demostrado con esta creatividad de abrir perfil de Tinder a los personajes más relevantes de las pinturas clásicas y revivir su esencia en pleno siglo XXI y en una app de citas muy utilizada por la población, la biografía es clave para que alguien se decante por ti y consigas un match. Esto se debe a que las palabras que añades en el perfil son la primera carta de presentación sobre tus gustos, tus intereses o forma de expresarte. De hecho, se ha demostrado que a un 30% de los solteros de la Generación Z le genera repelús que haya biografías con faltas de ortografía y otro 35% tira la toalla cuando dicho perfil presenta miles de requisitos para ser conquistado.
