El autor del estudio es Alfonso Vara Miguel, director del Departamento de Empresa Informativa de la Universidad de Navarra, y en él afirma que 2011 fue el año del crecimiento exponencial del pago de contenidos en las ediciones digitales de los periódicos, si bien, sostiene, se trata de una medida para defender las ediciones impresas, que son las que, a corto y medio plazo, seguirán sustentando los ingresos por publicidad y difusión del sector.
Si ya sabemos cómo deben ser los contenidos –“escasos, exclusivos, no fácilmente localizables en Internet, que aporten valor real, resuelvan necesidades informativas y de entretenimiento y/o sean útiles”–, Vara Miguel enumera, además, los valores diferenciales que considera claves para cobrar por la información: “la especialización temática, la de ámbito geográfico, la calidad percibida respecto a la marca editorial, la credibilidad y la confianza inspirada por el medio”.
A la información útil y diferente, y a la calidad y la especialización, hay que sumarle, según el profesor, otro elemento para que la fórmula funcione: la inversión. “Solo es posible implantar modelos de pago cuando lo que se ofrece al público es único y diferenciado, lo cual requiere inversión”.
