Además, la situación económica es desfavorable para casi nueve de cada diez participantes en el estudio; sin embargo, la percepción del mercado es mejor que la relativa a la economía nacional, influido por el mal momento que atraviesa la industria publicitaria. En cuanto a la percepción de la propia empresa del panelista, sólo el 14 por ciento la ve positiva.
En relación al pasado año, el comienzo de 2011 ha sido especialmente negativo para el sector audiovisual: el 86% de los participantes en el estudio observa cómo cada vez se encargan producciones más baratas, un sesenta percibe una reducción en el número de pedidos y casi la mitad sufre retrasos en los pagos.
La distribución tiende a la baja, a excepción de los capítulos y series de ficción (+0.8%) y el cine (+0.9%). Entre los motivos del descenso cabe destacar el incremento en el número de canales de televisión motivado por el encendido digital, así como las fusiones entre cadenas televisivas.
Pero no todo es negativo, ya que la ficción para cadenas nacionales y la producción de concursos evolucionan positivamente (+2,8% y +2%, respectivamente). Además, la TDT de pago se valora como positiva, aunque casi el 70 por ciento consideran que no influirá en el sector de la producción. La supresión de publicidad también se ve con buenos ojos.
