La crisis de Volkswagen en las redes sociales

Las menciones negativas en Twitter sobre Volkswagen han aumentado 61 puntos porcentuales y 14 en Facebook desde el inicio de

motores trucados de Volkswagen
Martin Winterkorn, expresidente de Volkswagen, mira el tubo de escape de uno de los vehículos de la firma.

Las menciones negativas en Twitter sobre Volkswagen han aumentado 61 puntos porcentuales y 14 en Facebook desde el inicio de la crisis de los coches trucados.

Tras conocerse la alteración de las pruebas de emisión medioambiental de la compañía, las menciones y conversaciones referentes a la marca alemana en redes sociales han aumentado hasta llegar a ser ocho veces superior a antes de la crisis, pero fundamentalmente de crítica de los internautas.

En un estudio realizado por Wunderman con sus herramientas de análisis semántico en tiempo real se comprobó también que durante la semana del 21 de septiembre, fecha en la que estalló la crisis, las noticias y los artículos en blogs relacionadas con la marca se multiplicaron por cuatro, por seis en los foros y por 15 en los tweets.

Reducción de actividad social

Centrándose únicamente en Facebook y Twitter, Wunderman apunta que la misma semana en la que se produce el pico de menciones y conversaciones, Volkswagen registró una considerable reducción de actividad social.
En Facebook la audiencia incrementó por cuatro los post dirigidos a la marca con un sentimiento negativo que aumentó del 79 al 93% en solo una semana. En Twitter, la participación proactiva de Volkswagen descendió un 52% respecto a la media semanal de septiembre, con un 82% menos retweets respecto a la media de septiembre. Es decir, la audiencia interaccionó menos con las publicaciones de la marca (RTs) pero, sin embargo, mostró su descontento con más menciones de sentimiento negativo. En concreto, los tweets negativos hacia la marca pasaron del 17% al 78% en una sola semana.

Afecta a otras marcas

Las conversaciones en tono negativo no se centraron únicamente en Volkswagen sino que la crisis arrastra también a otras marcas del grupo, como Seat, Audi y Skoda, aunque en menor medida, así como a sus homólogos alemanes BMW y Mercedes. En general afecta a todo el sector automovilístico alemán.